La tokenización, una tecnología fundamental para los pagos digitales

En sólo unos meses la población mundial ha adoptado nuevos comportamientos de consumo. En lo que respecta a los procesos de compra, se observa que cada vez más los consumidores priorizan el uso del dispositivo móvil en lugar del efectivo o las tarjetas. De hecho, para el 2030 los pagos digitales prácticamente se van a triplicar en el mundo hasta superar los tres billones de operaciones, según se desprende del informe Payments 2025 & Beyond, elaborado por PwC. 

El consumidor de hoy demanda a su vez una experiencia diferente y de mayor calidad. La innovación en los métodos de pago, ofreciendo soluciones 100% digitales, y la capacidad de las instituciones financieras de incorporar nuevas tecnologías con agilidad, en todos sus canales y de manera segura, se convierten en piezas clave. Y, en este contexto, la tokenización juega un papel muy importante. 

Un ‘token’ puede tener diferentes funciones, sin embargo, el uso más extendido hasta el momento de los tokens está vinculado a los métodos de pago digitales por las ventajas que brinda en cuanto a la mejor experiencia de usuario y la seguridad en sus transacciones. 

“La tokenización se ha convertido en una tecnología fundamental en lo que respecta a pagos digitales al permitir una experiencia de compra segura – porque los datos del usuario permanecen resguardados – y sencilla – es decir sin fricciones y con menos pasos -”, ha afirmado Gabriela Giannattasio, VP de EMEA de Veritran. “A su vez, genera directamente un incremento en lo que a transacciones respecta, ya que el cliente al sentirse satisfecho con la experiencia en general tiende a volver a repetirla”, agrega Giannattasio.

La tokenización garantiza la seguridad de los datos en todo el proceso de compra. En estos casos, se generan unos dígitos aleatorios que sustituyen a la información sensible del usuario (como los datos de una tarjeta o un código PIN) y así protegen que esta no quede expuesta cuando el dinero se mueve entre bancos o usuarios. De esta manera se evita el fraude, porque el número del token se asocia a una sola compra y no a una tarjeta. Además de la prevención de fraudes, en este caso el uso de la tokenización también revierte en una experiencia digital más simple, ya que se omiten pasos como preguntas extras de seguridad y existe un menor riesgo de que la compra se vea rechazada.

Si bien en España los principales bancos ya utilizan esta tecnología, su potencial de desarrollo es mayor, ya que por ejemplo está siendo muy considerada por cualquier tipo de entidad que procese pagos electrónicos. En este sentido, las instituciones financieras de menor tamaño, las llamadas PayTech (empresas tecnológicas de pagos), los emisores de tarjetas y hasta los fabricantes de wearables tienen en este campo una gran oportunidad para crecer.  

“Vemos una gran oportunidad de crecimiento de esta tecnología, sobre todo en estos momentos en los que el sector de las tarjetas debe reinventarse y se ven obligados a considerar otras alternativas ante el auge de los pagos digitales”, finaliza la VP de EMEA de Veritran.

Se estima que los pagos tokenizados crecerán a nivel global cerca del 50% en los próximos cuatro años, según indica el informe “Payment Tokenisation: Key Opportunities, Segment Analysis & Market Forecasts 2022-2027” elaborado por Juniper Research. En este sentido, estamos ante una tecnología que sigue y seguirá pisando fuerte, por ende, aquel que no la adopte puede correr el riesgo de quedar afuera del sistema.