Las 10 habilidades blandas que demandarán las PYMES en 2023

Empresa | España | Redacción | 3 de enero de 2023

asdf

En el mundo cambiante en que vivimos, en el que la automatización y la digitalización de las tareas cobran un mayor protagonismo, los responsables de recursos humanos valoran cada vez más las llamadas soft skills. Las también conocidas como habilidades blandas llegan a ser, en muchos casos, decisivas en los procesos de contratación. En este contexto, Kenjo, software de Recursos Humanos ‘todo en uno’ para PYMES, ha analizado cuáles serán las 10 soft skills que más demandarán las pequeñas y medianas empresas en nuestro país a lo largo de 2023.

Las soft skills son las habilidades que van más allá de los conocimientos técnicos específicos y de la formación de un empleado sobre determinada materia. Tal y como explica David Padilla, CEO y cofundador de Kenjo, “se trata de aquellas habilidades interpersonales que posee un trabajador y que están relacionadas con sus capacidades emocionales y sociales para adaptarse a la cultura de la empresa y al equipo”.

Las soft skills que demandarán las PYMES en 2023

Kenjo ha analizado cuáles serán las 10 habilidades que más reclamarán las pequeñas y medianas empresas en LinkedIn entre las ofertas activas estas semanas, y estas son las más demandadas:

  1. Resolución de problemas: se trata de la capacidad de las personas para afrontar y solventar cualquier dificultad que pueda surgir en el día a día laboral.

  2. Capacidad comunicativa: se refiere a la forma en la que nos comunicamos diariamente con compañeros, clientes, proveedores, etc. a través de diferentes canales (en persona, por teléfono o por escrito). Asimismo, esta habilidad está relacionada con la competencia de saber escuchar.

  3. Pensamiento crítico: es la capacidad de comprender problemas, analizar situaciones y tomar decisiones, independientemente de cuál sea el rol del empleado o el trabajo que debe desempeñar.

  4. Creatividad: hace referencia a la capacidad de crear nuevas ideas, conceptos o planteamientos en cualquier entorno laboral.

  5. Proactividad: se trata del comportamiento anticipatorio, que busca generar un cambio o mantener el control sobre determinada tarea o aspecto. Está vinculado al hecho de tener iniciativa,responsabilidad, compromiso, etc.

  6. Flexibilidad: como capacidad de adaptación al cambio por parte del empleado o empleada.

  7. Capacidad analítica: la habilidad que tenemos para procesar determinada información y tomar decisiones en base a esa reflexión.

  8. Compañerismo: como forma de relacionarnos con los demás compañeros y trabajar en equipo.

  9. Resiliencia: la capacidad que tienen las personas de afrontar una situación adversa o de cambio y recuperarse de ella.

  10. Agilidad en gestión de proyectos: la rapidez y eficiencia con la que un trabajador se desenvuelve a la hora de desempeñar su trabajo y cumplir objetivos.

“Incluir este tipo de información en el currículum, así como en los perfiles de redes sociales como LinkedIn es interesante de cara a ofrecer una visión 360 sobre nosotros. Tal y como hemos visto en el último año, los directores de recursos humanos valoran cada vez más la accesibilidad a este tipo de información a la hora de valorar a los candidatos e incluso de contratarlos”, comenta Padilla.

La importancia de las soft skills a la hora de seleccionar candidatos

Tal y como explican desde Kenjo, “los modelos de liderazgo están cambiando y nos dirigimos a entornos laborales cada vez más horizontales en los que las habilidades blandas son fundamentales a la hora de mantener un buen ambiente laboral y un desempeño laboral positivo”.

En este sentido, estos son algunos de los aspectos que las empresas tienen en cuenta en los procesos de reclutamiento y selección de candidatos:
Priorizar las habilidades blandas permite identificar a los empleados que, además de desempeñar bien su trabajo, aportarán un extra de motivación y favorecerán el buen ambiente del equipo.

A la hora de contratar, las habilidades blandas muestran el potencial de la persona y no solo sus conocimientos actuales; algo especialmente útil en los procesos de contratación de perfiles junior.

Prestar atención a las soft skills permitirá valorar con antelación si el perfil del candidato se ajusta y encaja con la filosofía y la cultura de la empresa. Además, una vez concluidos los procesos de contratación, permitirá mejorar el bienestar emocional de los empleados y su capacidad productiva.

Valorar este tipo de habilidades hará que se pueda evaluar al candidato de forma completa, es decir, tanto a nivel profesional como personal.

“En definitiva, en el ámbito laboral es importante que los empleados posean hard skills ( habilidades duras) y soft skills ( habilidades blandas) para que sean capaces de desempeñar su trabajo a nivel técnico y al mismo tiempo manejar situaciones del ámbito personal como son las relaciones con sus compañeros o situaciones que plantean retos laborales, entre otras”, concluye David Padilla.