González Byass, Empresa Familiar en XIV Premios Ejecutivos Andalucía

Premios | España | Redacción | 13 de noviembre de 2019

González Byass

Tradición familiar, respeto por el medio ambiente y compromiso con la calidad y la innovación, son los valores que la familia González lleva más de 180 años manteniendo generación a generación.

Son ya cinco las generaciones vinculadas a esta bodega y, aunque su corazón andaluz continúa siendo andaluz, la bodega tiene presencia en otras zonas de la Península Ibérica tradicionalmente vinícolas, e incluso ha cruzado el charco para establecerse en Chile, un país que trabaja intensamente para encontrar una posición de privilegio en el mapa latinoamericano de producción de vino.

González Byass Jerez (D.O. Jerez – Xeres – Sherry), Bode- gas Beronia (D.O.Ca. Rioja), Viñas del Vero (D.O. Somonta- no), Vilarnau (D.O.Cava), Finca Moncloa (V.T. Cádiz), Finca Constancia (V.T. Castilla), Beronia Rueda (D.O. Rueda), Pa- zos de Lusco (D.O. Rías Baixas), Fournier (D.O. Ribera del Duero), y Veramonte (Chile) son el testimonio de la pasión por el vino de González Byass. Pero hay más. Vermouth, ginebra, whisky, brandy o anís, siempre elaborados con el mismo cuidado con que producen sus vinos, completan la oferta para acompañar al paladar más exigente sea cual sea su gusto.
 
LA HISTORIA

La historia de González Byass arranca en 1835 cuando un joven Manuel María González Ángel se propone encontrar su lugar en un negocio, el de los vinos, que se encontraba en plena ebullición.

Fue gracias al asesoramiento recibido por parte de su tío, José María Ángel Vargas, que después se haría famoso por ser el “Tío Pepe”, el que le inculcó la necesidad de empezar a exportar el vino, siendo el principal mercado receptor el del Reino Unido. Una marca, Tío Pepe, nacida en 1844, y que no es solamente el vino fino de Jerez de mayor venta en el mundo, sino también el producto español con presencia en mayor número de países.

No pasaría mucho tiempo antes de que el mundo comenzara a descubrir la singularidad de los vinos de Jerez y la expansión del negocio hizo ver a Manuel María la necesidad de construir su propia bodega “La Constancia”, que se convertiría en uno de los rasgos más significativos del carácter del fundador y de sus descendientes. Años después llegarían “Los Apóstoles”, “La Cuadrada” y “La Concha” que aportarían los primeros viñedos.

Durante la década de 1860, las exportaciones de la compañía llegaron a suponer el 2% de las ventas españolas en el extranjero, un liderazgo que se mantuvo hasta 1918.

La expansión de la empresa fue constante a lo largo de todo el siglo xx, continuando en el presente siglo xxi. En 1955 se crea el CIE (Centro de Investigación Enológica), el primer centro privado dedicado a la investigación del vino en España, y es a partir de los años 80 cuando, en una apuesta por el desarrollo de los vinos de calidad, González Byass comienza a incorporar bo- degas de las zonas más emblemáticas de España, con la intención de poder representar fielmente la diversidad enológica del mundo.

EL FUTURO

La apuesta de futuro de González Byass pasa por continuar trabajando intensamente en la consolidación de sus vinos.

Una labor constante que ha recibido ya multitud de galardones y que sitúa a la bodega como un referente a nivel mundial. Pasa por continuar desarrollando los mercados internacionales para llegar a nuevos lugares. Y, en un país eminentemente turístico como es España, fomentar el enoturismo.