Claudia Dall

Claudia Dall’ Orso

Directora y creadora de Esdela by Corporación

En España, en 2019, se crearon un total de 94.742  empresas según un estudio de Informa D&B. En 2020, 79.779, un 16% menos. Pese a que ha habido un descenso, es un dato llamativo teniendo en cuenta la situación tan excepcional, y nos hace preguntarnos, ¿es buen momento para emprender? 

Las crisis, como las monedas, son una realidad de dos caras. Cualquier situación beneficiosa para unos, puede ser perjudicial para otros y viceversa. Sin embargo, en situaciones críticas, esta dicotomía se dispara. En muchas ocasiones, es una cuestión de fortuna, pues depende de en que lado de la realidad te haya tocado desempeñar tu papel. Con la crisis del coronavirus, por ejemplo, hay sectores que indudablemente se han visto beneficiados de una manera u otra; mientras que hay otros que están notando de forma muy aguda los efectos negativos de la pandemia. 

Sin embargo, es cuando nos sentimos amenazados, presionados, acorrolados, cuando sacamos lo mejor de nosotros mismos. Cuando nuestro día a día transucurre sin mayores preocupaciones, tendemos a relajarnos, dejarnos llevar por el ritmo que funciona, no arriesgamos esa comodidad porque no tenemos esa necesidad. Porque sí, somos humanos. Por tanto, desde luego es buen momento para, por lo menos, sacar partido de esa cualidad tan primaria. 

La clave, como siempre, es analizar y tomar decisiones en consecuencia. En tiempos de crisis siempre surgen necesidades que antes o no existían o no eran prioritarias. Los hábitos de consumo están cambiando y es algo que apunta a mantenerse incluso después de la crisis. El sector de la belleza, por ejemplo, no ha parado de evolucionar. La consultas, incluso, han aumentado, así como han surgido otras necesidades. Además, la competencia es menor. Hay empresas que han cerrado y otras que podrían haber surgido, pero posponen su salida al mercado. Esto, aunque es una situación negativa, puede convertirse en una oportunidad para nosotros. De la misma forma, también suele haber un descenso en los costes generales. La inversión económica al arrancar un negocio puede disminuir notablemente en tiempos de crisis, ya que los precios descienden generalmente. 

Por todo ello, en nuestro caso, decidimos dar el paso y reinventarnos. Ahora también ofrecemos tratamientos de estética avanzada, cuando antes estábamos especializados exclusivamente en depilación láser Alejandrita, así como hemos virado a una mayor personalización a tavés de la creación de Esdela Lab. Hemos escuchado a nuestro mercado. 

Burger King inauguró su primer restaurante en Jacksonville, Florida, en 1953, durante la recisión causada por la guerra de Corea ocupando. Electronic Arts (EA), tras la crisis en Estados Unidos de comienzos de los 80, diferenciándose por poner en valor el nombre de los creadores de los videojuegos, algo no común hasta el momento. Privalia nació en España en 2006 y en pleno desarrollo del proyecto, les alcanzó la crisis de 2008, como un outlet de moda online, pero de primeras marcas. Airbnb nació en plena crisis financiera global en 2008 como una web para alquilar cama bajo el concepto “Air bed and breakfast” (cama hinchable y desayuno). Procter & Gamble, HP, FedEx, Monapart, Uber, General Motors… Y estos son solo algunos ejemplos de gigantes del mercado que fueron capaces de identificar ese rayito de luz y convertirse en lo que son ahora.

Retomando por tanto la pregunta, ¿es un buen momento para emprender? Puede serlo si se sabe encontrar ese espacio y se tiene la capacidad para ocuparlo. Estamos convencidos de que las mejores ideas surgirán ahora.