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Óscar Torrejón es partner del reconocido estudio internacional de arquitectura luis vidal + arquitectos, con oficinas en España, Reino Unido, República Dominicana, Chile y Estados Unidos. 

Fundado en 2004 por el prestigioso arquitecto español Luis Vidal, el estudio luis vidal + arquitectos ha realizado con éxito más de 200 proyectos de diversas disciplinas (urbanismo, edificación y diseño industrial). Sus arquitectos han llevado a la arquitectura española a ser un referente mundial en sostenibilidad y diseño, destacando en proyectos de aeropuertos, hospitales, centros educativos, culturales y grandes complejos de oficinas.

El porfolio de transporte del estudio incluye más de 15 proyectos de aeropuertos internacionales, donde destaca especialmente la Terminal 2 de Heathrow (Londres). Inaugurada en 2014, ha recibido más de 27 premios y nominaciones y es la primera terminal con certificación BREEAM Excelente por su diseño sostenible, que reduce un 40% las emisiones de CO2.

Uno de sus últimos proyectos más emblemáticos son las nuevas Torres Colón. ¿qué variables aporta su diseño? 

Desde el primer momento hemos buscado convertirlo en el edificio de oficinas más sostenible y moderno de Madrid. Un proyecto que comparte valores con todos los trabajos realizados por luis vidal + arquitectos hasta la fecha. Será un edificio del siglo XXI, que dará respuesta a retos urbanos de acceso, movilidad y eficiencia energética. Madrid está evolucionando y se está revitalizando, y las Torres Colón también deben hacerlo. Aspiramos a convertirlas en el Primer Edificio de Oficinas de Consumo Casi Nulo de España, el edificio más avanzado y sostenible de Madrid. 

¿Hasta qué punto es la sostenibilidad un factor clave en la arquitectura del futuro?

La sociedad, y por tanto la arquitectura, no puede vivir de espaldas al medioambiente. Su impacto en nuestro planeta tiene consecuencias. Es una preocupación global, actual y uno de los valores de luis vidal + arquitectos desde su fundación, hace casi 17 años. En ese sentido, llevamos casi dos décadas de ventaja y de experiencia. Cualquier proyecto en el que trabajamos en el estudio nace siempre con vocación sostenible y eficiente. Para nosotros es una cuestión de responsabilidad, algo inherente a nuestra filosofía y forma de trabajar. De hecho, somos pioneros en España en hacer proyectos que obtienen las certificaciones internacionales de edificios sostenibles más prestigiosas, como LEED Platino -en Castellana 77 y la Universidad Loyola de Sevilla- y BREEAM -La terminal 2 de Heathrow, donde ejercí mi función de director de proyecto, fue el primer aeropuerto del mundo en obtener un BREEAM Excelente por su reducción de emisiones de CO2 casi un 40%; y el Hospital Álvaro Cunqueiro de Vigo fue tomado como modelo BREEAM para esta tipología en España). Las Torres Colón, como mencionaba antes, aspiran a ser el Primer Edificio de Oficinas de Consumo Casi Nulo de España. Nuestros aeropuertos internacionales en Boston, Dallas y Pittsburgh (Estados Unidos) van a ser de los más avanzados del país en materia medioambiental, y lo mismo con nuestros trabajos en Chile y República Dominicana (Patio Kennedy en Santo Domingo aspira a ser Leed Oro Core and Shell). En todos nuestros proyectos buscamos ofrecer ese valor +, que es nuestro aporte distintivo, y que en términos de sostenibilidad tiene, además, un gran impacto positivo en el entorno. 

Entrevista

¿Qué puede contarnos del proyecto de la Universidad Loyola? 

Con el nuevo campus de la Universidad Loyola buscamos conseguir espacios flexibles, eficientes y confortables que favorecieran la comunidad universitaria y la actividad académica. El futuro inmediato pasa por la tecnología y la conectividad. Por eso, hablamos del primer campus integrado 5G del mundo: tecnológico, accesible, sostenible, flexible y que toma al ser humano como medida. Su eficiencia energética es ya un referente medioambiental al haber recibido el certificado medioambiental LEED Platino, el primer campus integrado del mundo en obtenerlo.

Para lograrlo hemos adoptado diferentes estrategias. En lo que respecta a los materiales, más del 20% de ellos provienen de usos anteriores, y más del 30% tienen extracción y producción a menos de 800 km. Por otro lado, se ha restaurado la vegetación de la parcela con especies autóctonas o adaptadas de forma consistente con el clima local, lo que redunda en menos riesgos para la flora local existente, menos consumo de agua y mejor tasa de supervivencia de las especies implantadas. 

Asimismo, hemos hecho un uso eficiente del agua, con un sistema de recuperación parcial de aguas grises y la correcta gestión del agua de lluvia en la parcela para determinados usos. En cuanto a las medidas de eficiencia energética, se destaca la adecuada orientación del edificio -principalmente Norte y Sur, y el control del soleamiento. Con todas estas medidas, hemos conseguido que este edificio logre consumir alrededor de 40% menos de lo que consume un edificio similar.

Entre los proyectos del estudio destacan también los relacionados con el ámbito sanitario. Pensando en la actual pandemia, ¿qué deberán tener en cuenta las nuevas propuestas arquitectónicas hospitalarias? 

La Covid-19 ha impulsado la creación de proyectos sanitarios más seguros y modulables. La infraestructura sanitaria debe adelantarse a cualquier crisis puntual que se pueda presentar en el futuro. Si algo nos está permitiendo esa situación es la de replantearnos la importancia del espacio, la seguridad, el aislamiento y la independencia. luis vidal + arquitectos llevamos años trabajando en un nuevo modelo de hospital de futuro: flexible, seguro, adaptable, tecnológico y más humano. Capaz de dar respuesta a los retos presentes y futuros, con una resiliencia eficaz para cualquier escenario, por muy imprevisto y complejo que sea.

Es un modelo al que hemos llegado gracias a nuestra amplia experiencia en el diseño de infraestructura sanitaria, como el Hospital Álvaro Cunqueiro de Vigo (uno de los mayores de Europa, y nombrado “Hospital del Futuro”), el Centro Comunitario de Salud Matta Sur en Santiago de Chile y otros proyectos en curso como la torre sanitaria Netclinic en Santo Domingo, el Campus Oncológico Infantil para la Fundación Amigos Contra el Cáncer Infantil (FACCI), también en Santo Domingo, y el Campus de Salud y educación en Bávaro. Este modelo integra las últimas tecnologías, espacios intuitivos, nuevos materiales, confort térmico, acústico y lumínico, el uso de luz natural para garantizar la seguridad del espacio, rebajar la incertidumbre y devolver al usuario (paciente, familiares y trabajadores sanitarios) su libertad de movimiento y de elección. 

Entrevista

También tienen proyectos futuristas. Cuéntenos, ¿qué es La Casa del Futuro? 

Es un encargo de la compañía japonesa Sumitomo que plantea cómo podrían ser las viviendas en el 2050. Se prevé que, en los próximos 30 años, en las ciudades vivirán 7.300 millones de habitantes. Frente a esta concentración demográfica en las urbes, la arquitectura tiene el reto y la responsabilidad de repensar conceptos como la flexibilidad, el espacio y el volumen. 

La Casa del Futuro no está limitada por la tecnología puntual ligada a un momento concreto. No sabemos qué tecnología se utilizará dentro de 30 años, pero sí es posible replantear el espacio de la vivienda en términos de volumen sin el límite de las dos dimensiones. Creemos que el próximo hito en la vivienda se medirá en metros cúbicos y no cuadrados. El interior doméstico del siglo XXI necesita flexibilidad, almacenaje y comodidad. Un espacio modular de superficies volumétricas, fácil de usar, donde son esenciales la luz natural, la relación con el exterior y el cambio de mobiliario interior. 

La Casa del Futuro resume muy bien nuestra filosofía, lo que motiva nuestro trabajo, lo que genera cada esquema, croquis, plano que hacemos en luis vidal + arquitectos: trabajar desde el presente mirando al futuro, adelantar los retos a los que la sociedad se va a enfrentar y proponer soluciones de calidad.